De fondo, la Mala Rodriguez, es LA mala... Me quiero arriesgar, no tengo miedo, no temo. Estoy en mi luto imperfecto pero tranquilo, no me importa, no me importa lo que tú creas ni pienses de mi, solo me importa como seas conmigo, la lucha de mi vida es interminable y crece con el odio de mis enemigos... que siempre son mis amigos y yo. Y yo me mantengo en el aire y me elevo de una manera extraña, grito pero no me escuchan, es tranquilidad, miedo, terror, exterior en contra del interior. Y no logro concentrarme y no puedo dejar de escuchar los sonidos en mi cabeza y todo se vuelve extremo, mayor, la música tortura mis sentidos y me duelen los ojos. Me gusta esta música indecisa, extraña, sensual. Ultimamente eso es, lo de la piel, ese tema lejano pero cercano... el mismo.
Y tráiganme una copa! o dos! o miles! Esta noche soy solitaria, extraña y memorable, no le temo a la oscuridad y menos a la luz, jamás nunca temeré a la luz que me alumbra y me muestra como soy, el viento está enojado afuera, me lo dijo con su silbido desquiciado y suenan las tejas y la música se acerca a mi cara y yo sintiendo esta sensación sonora interminable y terrorífica y me hallo en mi misma y qué! Soy una, soy todos al mismo tiempo y aparece en mi mente tu ligereza extraña, tu misterio, tu amor de madre, tu hermandad de amigos al final, y siempre aparecen todos ustedes, los que me rodean, los que son mi entorno y a lo lejos... bien lejos, el más importante de todos... el moreno de cabeza calva, con tatuajes, con los ojos amarillos y la sonrisa lenta.. el de todos los chilenos, el que no sabe bailar pero el vaso lo toma con seguridad envidiable, el mismo cabrón de siempre, mi ídolo, mi súper héroe!
Y derrepente cae del cielo un suspiro y me vuelvo fokin sentimental y no me gusta, y pienso en Residente... el único y el más perfecto y si tú! sí, tú me acompañas estará cabrón... eso si que estará cabrón! Y la Mala se acerca a mi cara y me recuerda que es ella quien suena por los parlantes y quisiera sacarlos a la calle e invitarlos a todos y compartir una cerveza con los amigos, los compañeros, los hermanos y que quizás... en algún movimiento inesperado te aparecieras por ahí. Y no te voy a contar nunca quien eres, no esperes que lo haga por que no lo haré.
La rudeza de mis manos cuando me vuelvo una nena, una de las mismas que no soporto, pero qué me da a mi? Solo me importa mi familia, mi gente y yo.
Y tengo toda la fe y estoy dispuesta a correr el riesgo, por el momento me siento por ahí, tomo mi armónica amiga y me alejo de la ciudad que odio, el calor que me envuelve en estupidez y que seca mis pensamientos llenándome de negatividad... mejor me voy por ahí, me elevo, medito y te encuentro en el cielo... por Neptuno, porque yo me voy contigo a Neptuno volando mi amol! eso es seguro...
Y el idioma que hablo no se comprende, debe ser mi mente, debe ser el viento, debe ser que soy la cocinera y yo decido quién come y quien muere de hambre. Por que tengo el poder, soy la poderosa de mis actitudes y mis reacciones y temo más arrepentirme que negarlo. Qué? algún tipo de problema? tú tienes un problema contigo??? cómo lo solucionamos? o no lo solucionamos y nos vamos por ahí a romper el tiempo.
Y no me canso, soy de fierro y de seda... sedo.. cedo... y qué de nuevo. Y la música que me anima a no parar de mover las extremidades de mis brazos, las ramas de mi cuerpo... las que pueden abrazar, entregar calor, romperte la piel, molestarte y bueno...
Qué? a ver, qué?
